Compras Responsables

Política de compras responsables

El consumo responsable es una manera de consumir bienes y servicios teniendo en cuenta, además de las variables de precio y calidad, las características sociales y laborales del entorno de producción y las consecuencias medioambientales posteriores. Cada producto o servicio tiene una historia, y para engrandecerla a continuación se presentan los siguientes lineamientos aplicados por Ruta PiCaSo.

  • Ser ecologista y evitar la contaminación.
  • Antes de comprar algo, reflexionar detenidamente si realmente se necesita comprarlo o si solo se está siendo guiando por la publicidad.
  • Al decidir comprar algo, averiguar muy bien de qué materia prima se fabrica, de qué manera su proceso de manufacturación impacta al medio ambiente y si genera algún daño o injusticia social.
  • Considerar el impacto ambiente y al entorno social.
  • Al comprar algo, considerar el impacto causado por los residuos y la basura que genera.
  • Evitar los productos descartables o desechables si no son estrictamente necesarios.
  • Rechazar las bolsas de plástico que dan en supermercados y comercios. Al hacer una compra, llevar bolsas propias de tela, de papel, de cartón o incluso las de plástico usadas anteriormente hasta que sean inservibles.
  • Comprar el contenido y no el envase. Muchas veces se paga más por todo lo que implica la fabricación y la eliminación de los envoltorios, que se tiran directamente a la basura, que por el contenido.
  • Reciclar antes que comprar, muchas de las cosas que están para tirar se pueden volver a utilizar de otras maneras y formas.
  • Dar prioridad a la compra de productos o servicios, locales y nacionales.
  • Dar prioridad a productos con envases retornables o reutilizables.
  • Usar artículos desechables, que sean de materiales compostables, biodegradables o, en todo caso, reciclables. Por ejemplo, platos, vasos, cubiertos, bolsas, bolígrafos desechables de materiales compostables, como bioplásticos, en lugar de plásticos.
  • Apagar todo cuando no se necesite.
  • No encender la calefacción cuando no sea necesaria.

Tomen en cuenta que cada vez que se adquiere algo, especialmente local, se está dando un voto a favor de los productos comprados, de los procesos utilizados en su fabricación, de la generación de ciertos tipos de residuos, del fomento al empleo en la comunidad, así como de la difusión y preservación de la cultura. Ustedes, como cada uno de nosotros, son partícipes y responsables.